Cómo limpiar suelo de cemento sin pulir: Trucos profesionales

Los suelos de cemento se han convertido en toda una tendencia del interiorismo.

Una superficie con grandes prestaciones estéticas cada vez más común en el ámbito domiciliario.

Su limpieza suele ser un tema algo complejo. Por ello, hemos decidido darte algunos trucos para acabar con la suciedad que en ellos se acumula.

¿Estás listo?

Coge papel y lápiz y toma nota sobre cómo limpiar suelo de cemento sin pulir.

Cuando vayas a limpiar un suelo de cemento ten en cuenta su gran poder absorbente de agua y grasas.

Particularidades del suelo de cemento

Para saber cómo limpiar suelo de cemento sin pulir, el primer paso es familiarizarse con sus características.

No hablamos de sus propiedades estéticas, sino de las particularidades funcionales.

A continuación, encontrarás las más destacadas. Tenlas en cuenta antes de ponerte manos a la obra y te ahorrarás pérdidas de tiempo innecesarias:

  • Alta absorción de agua. Como superficies de gran tamaño y alta porosidad, los suelos de cemento absorben grandes cantidades de agua. Algo que puede facilitar en gran medida la eliminación de la suciedad.
  • Penetración de la grasa. Al igual que el agua, la grasa también penetra en grandes cantidades y a enorme profundidad en las superficies de cemento. Esta propiedad, por el contrario, complica la higiene de la superficie.
  • El polvo, un gran enemigo. Cualquier suelo de cemento produce y acumula el polvo en cantidades sobrecogedoras. Pero no te alarmes, quitarlo es mucho más sencillo que el resto de las cuestiones asociadas a la limpieza de dichas superficies.

Valora estas características antes de comenzar tus tareas de limpieza. ¡No todos los suelos son iguales!

Cómo limpiar suelo de cemento (sin pulir)

Entre todas las tendencias en suelos para casas modernas, este material se ha ganado un hueco de especial reconocimiento.

Hay quienes optan por materiales que imitan al cemento y quienes directamente eligen este material como protagonista.

Lo que suele ocurrir es que a la hora de realizar labores de limpieza, la cosa se complica. No es tan sencillo como limpiar un suelo de mármol u otro laminado.

Veamos qué recomendaciones podemos seguir para disfrutar de un suelo limpio sin complicaciones.

Pasos que debes seguir para limpiar el suelo de cemento

Para explicar cómo limpiar suelo de cemento sin pulir, hemos elaborado una pequeña guía que te será de utilidad.

Varios pasos que debes seguir en todos los casos para resolver la labor sin mayor complejidad.

¡Síguela al pie de la letra!

  • Prepara el suelo para la limpieza. Esto es evidente, pero no todo el mundo lo hace. Antes de ponerte a limpiar el suelo de cemento, quita todo el mobiliario y demás objetos de la habitación. ¡Verás la cantidad de tiempo que te ahorras!
  • Quita todo el polvo. Como bien te hemos comentado, los suelos de cemento acumulan grandes cantidades de polvo. Así que toca sacar la escoba o la aspiradora y eliminar cada mota.
  • Emplea productos con pH neutro. Para prevenir el deterioro del material, emplea siempre productos de limpieza con pH neutro. Otros como el amoniaco o la lejía terminarán provocando daños irreparables en el acabado del cemento.
  • Friega de la forma correcta. Con un gran cubo de agua y una taza del producto de limpieza, empieza a fregar la superficie. Hazlo desde las esquinas hasta la puerta y moja la fregona con frecuencia.
  • Repite el procedimiento. Una vez se haya secado el suelo, lava la fregona y repite el procedimiento. ¡El resultado será impecable!

Las mangueras a presión para eliminar la suciedad acumulada

Los suelos de cemento tienden a acumular mucha suciedad. Sobre todo, si se encuentran en el exterior.

Por eso, si te es posible, emplea una manguera a presión para quitar elementos como ****las hojas y la pinocha.

Eso sí, recuerda que la absorción de agua puede ser un problema si no se cuenta con un desagüe o si el sol no da sobre dicha superficie.

Asegúrate de que el agua no se encharca después de utilizar la manguera.

Acto seguido, ya podrás aplicar todos los pasos previamente enumerados para proceder con la limpieza del suelo.

Elimina las manchas más resistentes

Más allá de saber cómo limpiar suelo de cemento sin pulir, se debe tener en cuenta que hay manchas que tardan más en salir que otras.

Dada la tendencia de este material a absorber las grasas, te animamos a que inviertas en un buen producto antigrasa. Sí, como el que empleas en tu cocina.

Mézclalo con el agua y tu limpiador pH neutro o, por otro lado, aplícalo de manera directa sobre el suelo.

Después de dejarlo actuar unos pocos minutos, cepilla la superficie y aclárala.

Siguiendo esta línea, hay manchas comunes como las de aceite de coche que suelen estar presentes en este tipo de suelos.

Ya te hablamos de cómo solucionar este problema en su día. Pero nunca está de más hacer un pequeño repaso. Estos son los tres productos que puedes aplicar:

  • Aguarrás mineral. Frota la superficie con un cepillo húmedo y añade poco a poco aguarrás mineral. Para terminar, elimina la grasa restante con un trapo.
  • Fosfato trisódico. Antes de utilizar este producto, evita que entre en contacto con tu piel. Ponte guantes, sigue los pasos de limpieza anteriores y, al terminar, deja que tu garaje se ventile. Un método mucho más adecuado para los suelos de exterior.
  • Bicarbonato de sodio. Todo un clásico entre los productos de limpieza. Mezcla agua con bicarbonato y cepilla el suelo hasta que desaparezca la mancha de aceite. Enjuaga con agua abundante y deja que se seque la superficie ya limpia.

¿Qué te han parecido nuestros trucos? ¿Se te ocurre alguno más?

Es evidente que saber cómo limpiar suelo de cemento sin pulir es algo que te será de gran utilidad para el día a día.

No obstante, tampoco tienes por qué estar siempre con los guantes de limpieza puestos. En ocasiones, lo mejor es delegar en profesionales.

Así que, si quieres dejar de sudar la gota gorda con cada mancha en tu superficie de cemento, escríbenos.

En Ático 07 nos morimos de ganas por ayudarte a mantener tu casa, comunidad u oficina siempre impecable. ¡Da igual si son suelos, techos o paredes!

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