Una reforma en el hogar puede ser el comienzo de una nueva etapa, llena de frescura y renovación.
Sin embargo, el proceso también deja tras de sí un rastro de polvo, suciedad y escombros que puede ser abrumador.
Ante esta situación, la limpieza después de una obra es esencial para disfrutar plenamente de los cambios realizados, pero ¿cómo abordar esta tarea de manera eficaz?
A continuación, compartimos algunas técnicas y consejos para limpiar tu casa tras una reforma, asegurando que cada rincón quede impecable.
Consejos para limpiar después de una obra
Antes de entrar en detalle y analizar las especificidades de cada superficie para dar respuesta a cómo limpiar la casa después de una reforma, es importante destacar algunos consejos generales para la limpieza post-obra:
- Equipamiento adecuado. Utiliza guantes, mascarillas y otros elementos de protección personal para evitar la inhalación de polvo y el contacto con sustancias irritantes.
- Limpieza de arriba hacia abajo. Empieza limpiando las zonas más altas y avanza hacia las más bajas, para que el polvo y la suciedad caigan hacia el suelo, que será lo último en limpiar.
- Ventilación. Asegúrate de ventilar bien las áreas mientras limpias para dispersar el polvo y los olores de los productos de limpieza.
Ahora sí, veamos cómo limpiar la casa después de una reforma.
Cómo quitar el blanquecino del suelo
Después de una obra, es común encontrar una capa blanquecina en el suelo, especialmente en los de cerámica o porcelanato.
Esta capa es causada por los residuos de yeso o cal.
Para eliminarla, por lo general, una mezcla de vinagre y agua puede ser muy efectiva.
Sigue estos pasos:
- Mezcla una parte de vinagre por cada tres partes de agua.
- Aplica la solución directamente sobre el suelo con un mopa o paño suave.
- Deja actuar unos minutos y luego frota suavemente con un cepillo de cerdas suaves.
- Enjuaga con agua limpia y seca con un paño seco.
Advertencia: antes de proceder con la limpieza, es crucial identificar el tipo de material de tu suelo.
Las superficies como mármol, granito, o cerámica mate pueden requerir cuidados especiales para evitar daños.
Por ejemplo, el mármol es particularmente sensible a los ácidos, por lo que el vinagre, un ácido suave, podría no ser la mejor opción para este tipo de superficie.
Sigamos viendo cómo limpiar la casa después de una reforma.
Cómo limpiar azulejos mate después de una obra
Los azulejos mate también pueden verse afectados tras una reforma y requerir de una limpieza específica.
En este sentido, los azulejos mate, en particular, pueden presentar un desafío único debido a su acabado sin brillo, que puede ocultar polvo y residuos pero también es más susceptible a manchas persistentes.
Una forma genérica de limpiarlos podría ser la siguiente:
- Prepara una solución de agua caliente con un poco de detergente neutro.
- Con un paño suave o esponja, aplica la solución sobre los azulejos.
- Para manchas persistentes, puedes usar una mezcla de bicarbonato de sodio con agua para crear una pasta y aplicarla directamente sobre la mancha.
- Aclara con agua limpia y seca con un paño suave para evitar marcas.
Si te encuentras con manchas de mortero o cemento, es posible que necesites un producto limpiador específico para cemento que esté diseñado para no dañar el acabado de los azulejos.
Estos productos se aplican sobre la mancha, se dejan actuar durante un tiempo especificado y luego se limpian.
Cómo limpiar el suelo después de una obra
Para una limpieza profunda del suelo, la combinación de vinagre y bicarbonato de sodio es especialmente eficaz. ¿Estás listo?
- Barre o aspira el suelo para eliminar el polvo y escombros mayores.
- Prepara una mezcla de agua caliente, un chorro de vinagre y una cucharada de bicarbonato de sodio.
- Friega el suelo con esta solución, prestando especial atención a las manchas difíciles.
- Enjuaga con agua limpia y deja secar.
De forma más específica, podemos añadir que para suelos de madera lo ideal es usar un trapo ligeramente húmedo y productos específicos; para laminados un paño húmedo, evitando el exceso de agua; para cerámica soluciones de limpieza neutras o ácido muriático diluido con precaución; y para piedra natural limpiadores de pH neutro.
Cómo limpiar paredes después de una obra
Por último, para explicar cómo limpiar la casa después de una reforma tenemos que prestar atención a las paredes. Estas también necesitan una limpieza profunda después de una reforma.
Así, aunque te aconsejamos determinar el tipo de acabado de la pared y el tipo de suciedad o mancha que estás tratando, de manera general, puedes seguir estos pasos:
- Empieza eliminando el polvo con un cepillo suave o un paño seco.
- Para manchas de pintura o yeso, utiliza una esponja húmeda con agua y un poco de detergente neutro.
- Frota suavemente para no dañar la pintura o el acabado de la pared.
- Enjuaga la esponja y pasa sobre la zona nuevamente para quitar residuos de detergente.
- Deja secar al aire o pasa un paño seco para absorber el exceso de humedad.
Limpiar después de una obra puede parecer una tarea desalentadora, pero con los métodos y productos adecuados, es posible devolverle a tu hogar su brillo y limpieza habituales.
En cualquier caso, una alternativa es delegar este tipo de tareas en empresas especializadas.
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